Me encantan las mermeladas caseras, dan muchísimo juego pudiendo añadirles muchas especias y sabores, además son un regalo estupendo, hecho a mano y con amor.
Ayer hice esta de piña y vainilla, que ya viene siendo de nuestras favoritas, el puntito a´cido de la piña con el sabor dulzón de la vainilla casan genial.
Hacer mermeladas es trabajoso, sobretodo el envasado, etiquetado, etc, pero vale mucho la pena. Continue Reading…